El 80% de nuestros envases son reutilizables, bien porque se pueden volver a rellenar, como los molinillos, o bien porque se les puede dar una nueva vida, como nuestros vasos, que una vez que se acaba la sal, pueden servir para disfrutar de un buen vino.
El 90% de nuestros envases estan realizados con materias primas reutilizables: vídrio, cartón, corcho…
Diseñamos nuestros productos pensando en la reducción de residuos: eliminamos embalajes superfluos y minimizamos las etiquetas para reducir el impacto ambiental.
Nuestras instalaciones disponen de un plan de ahorro energético con placas solares que generan 100.000 kWh al año.
En el criterio de selección de los proveedores, a parte de la seguridad alimenticia, priorizamos aquellos que mejor garantizan la preservación del territorio y la actividad agraria sostenible.